Dentro de todo neumático, sea el vehículo que sea, contienen
un armazón que suele ser de aluminio, que se le denomina llantas. Las llantas
es una parte fundamental de la rueda y del
neumático que tienen que si o si complementarse de la mejor manera
posible para que el andar del vehículo sea óptimo. Si las llantas no tienen la
complementación necesaria con respecto al neumático, claramente eso se verá
afectado al andar del vehículo y probablemente hasta se pueda sentir en el
volante que esta sosteniendo el conductor. Las llantas deben presentar la
resistencia adecuada a la cual se las someterá y este depende de varios
factores como lo son en principio la superficie a través de la cual se
desplazará el auto que dependiendo de cómo este conformada someterá a las
cubiertas a daños mayores o menores, y de este modo las cubiertas dependiendo
de su forma y de los materiales con los cuales estén conformadas se adaptarán
mejor o peor a determinados materiales, siendo algunas superficies mucho más
dañinas para algunas cubiertas que para otras. Las llantas dependerán de la
forma del vehiculo también, es decir, de los tamaños que necesite tener en sus
neumáticos y del tipo de deslizamiento que tiene el vehiculo que puede variar
mucho. No será lo mismo las cubiertas de la rueda de un avión que las llantas
de las ruedas de una bicicleta, puesto que el desplazamiento, la velocidad, y
el peso transportado por estos vehículos varía considerablemente. Las llantas tienen como función primordial la de
proteger el neumático de los daños que pueden serle ocasionados tanto por la
superficie por la cual se desplaza como por agentes externos que pudieran
atacarlo como pueden serlo una piedra en el camino o un mismo humano que desea
destruirlo.
En la actualidad los mercados se expanden y adoptan
distintas formas a través de las cuales el consumidor puede acceder a los
productos que esta buscando, ya sea comprando a través de Internet, a través de
negocios en la calle, haciendo pedidos de larga distancia por correo, a través
de proveedores que mandan a pedir mercadería, etc. Lo interesante es que estas
modalidades cada vez se diversifican más haciendo del mercado algo heterogéneo
y no simplificable. Esto hace que surjan formas más convenientes de comprar cosas
dependiendo del momento y del tipo de producto que se desea adquirir. A la hora
de comprar llantas existen varias cosas a ser tenidas en cuenta. Como en todo
rubro debe conocerse que cada producto posee especificidades y en función de
ella el mercado adopta diversas formas y surgen comparaciones con los demás
productos a fin de realizar una mejor compra. Para comprar llantas de forma
satisfactoria debe tenerse en cuenta para empezar el uso que se les dará a los
mismos y en función de ello empezar a realizar una búsqueda que se ajuste a
tales necesidades. Existen diversas formas de arrancar a hacer tal búsqueda, y
se recomienda por ello estar lo mejor informado posible acerca de las
características para que comprar llantas se vuelva una tarea fructífera.
Hay que saber elegirlas.
Puede realizarse una comparación de marcas de llantas
simplemente tomando como criterio la calidad general de los mismos, de modo tal
que podríamos distinguir entre neumáticos de primera línea, de segunda línea,
de tercera línea, etc. Ligada a esta aunque no tan directamente podríamos
realizar distinciones tomando en cuenta el criterio del precio de los
neumáticos que estas marcas ofrecen. Esta distinción no sería tan simple como
ordenar los precios del mayor al menor, pues al hacer esto nos estaríamos
perdiendo una información más interesante y fructífera. Esta información sería
la obtenida si primero tomáramos la comparación realizada por calidad que
divide entre marcas de primera, segunda, tercera línea, y dentro de cada una de
ellas realizáramos ahora si una distinción basada en el precio; esta distinción
sería más productiva ya que al realizarse en el interior de una distinción de
calidad podría mostrar qué marcas ofrecen productos más baratos y qué marcas
ofrecen productos más caros pero con calidades similares, de modo tal que esta
comparación le permite al usuario primero establecerse dentro de una línea de
calidad a la cual aspira y una vez allí tomar partida o bien por un producto
económico, o bien, teniendo en cuenta la calidad, por un producto quizás más
costoso pero que plantee una mejora en la calidad.